Historia
La tortuga de orejas rojas es originaria del sureste de Estados Unidos, especialmente de los estados de Luisiana, Misisipi y Texas. Su nombre proviene de las características franjas rojas que se ubican a ambos lados de su cabeza, justo detrás de los ojos. Durante décadas ha sido una de las tortugas acuáticas más comercializadas en el mundo como mascota, aunque en muchos países hoy su venta está regulada o incluso prohibida, debido a su impacto negativo como especie invasora en ecosistemas donde fue liberada.
Características
Tamaño adulto: las hembras pueden alcanzar entre 25 y 30 cm, los machos son más pequeños, entre 15 y 20 cm.
Peso: entre 1 y 2 kg en edad adulta.
Coloración: caparazón ovalado verde oliva con líneas amarillas; piel verdosa con rayas finas amarillas; las orejas rojas son distintivas.
Esperanza de vida: 20 a 40 años en cautiverio, con buenos cuidados.
Tipo de reptil: semiacuático, pasa gran parte del tiempo en el agua pero necesita zonas secas para tomar sol.
Personalidad y comportamiento
Aunque no son animales “afectuosos”, con el tiempo pueden reconocer a su cuidador y acercarse durante la alimentación. Son curiosas, activas y necesitan espacio para nadar. Disfrutan tomar sol en su plataforma seca y suelen ser más activas durante el día.
Cuidados
Acuaterrario: mínimo de 200 litros para un ejemplar adulto.
Zona seca: con plataforma accesible y espacio suficiente para que se seque completamente.
Temperatura del agua: entre 24°C y 28°C (se recomienda un calentador sumergible).
Temperatura en zona seca: entre 30°C y 35°C con lámpara de calor.
Luz UVB: fundamental para evitar enfermedades óseas.
Filtro: imprescindible para mantener el agua limpia. Las tortugas ensucian mucho.
Substrato y decoración
No es obligatorio tener substrato, pero se puede usar grava gruesa (que no puedan tragar). Se recomienda incluir plantas acuáticas resistentes (o artificiales), rocas seguras y troncos.
Alimentación
Omnívora:
Proteína animal: pellets específicos, pescado blanco, camarones secos (ocasionalmente), grillos o lombrices.
Vegetales: escarola, rúcula, diente de león, zanahoria rallada, calabacín.
Frutas: solo como premio ocasional (ej: frutillas, manzana).
Frecuencia:
Juveniles: alimentación diaria.
Adultos: 3 o 4 veces por semana.
Salud y enfermedades comunes
MBD (enfermedad metabólica ósea): por falta de calcio o UVB.
Problemas respiratorios: si hay baja temperatura o humedad alta.
Otitis: infecciones del oído medio, visible por bultos laterales en la cabeza.
Hongos en el caparazón: causados por mala higiene del agua.
Consejo
Nunca la sueltes en un espacio natural, ya que puede convertirse en una amenaza para especies locales. Además, no te olvides de secar bien el caparazón con un paño suave una vez a la semana para evitar proliferación de bacterias u hongos.
¿Es la tortuga ideal para vos?
Si tenés espacio suficiente, podés mantener agua limpia, y te interesa un reptil que combine vida acuática con momentos de sol, la tortuga de orejas rojas puede ser una excelente compañera de largo plazo.
Curiosidades
Pueden mantenerse activas todo el año, pero en ambientes fríos entran en brumación, reduciendo su metabolismo.
Usan las patas delanteras como abanicos para cortejar a otras tortugas.
En algunos países es ilegal venderlas por su impacto como especie invasora.
Conclusión
Fascinantes y longevas, las tortugas de orejas rojas son reptiles exigentes pero gratificantes. Requieren compromiso, higiene y espacio, pero devuelven con su encanto semiacuático y sus comportamientos únicos.
Aún no hay opiniones. ¡Sé el primero en comentar!
⚠️ Debes estar registrado para dejar un comentario.