Originario del sudeste asiático (Tailandia, Camboya y Vietnam), el Betta fue criado durante siglos por sus intensas peleas entre machos. Hoy es uno de los peces más populares del mundo por su belleza y resistencia.
Tamaño: 5 a 7 cm
Colores: rojo, azul, blanco, amarillo, turquesa, multicolores
Machos con aletas largas y elegantes
Vida: 2 a 4 años (a veces más con muy buenos cuidados)
Muy territorial
Solitario, observador y curioso
Los machos son extremadamente agresivos entre sí
No les gusta el movimiento fuerte del agua
Les gusta “descansar” en hojas o cuevas
Acuario mínimo: 5 a 10 litros
Temperatura: 24 °C a 28 °C (requiere calentador)
Filtro suave (evitar corriente fuerte)
Cambios de agua frecuentes (30% semanal)
Decoración: plantas naturales o artificiales suaves, refugios
Omnívoro: escamas, pellets especiales, larvas de mosquito, artemia
Se recomienda variar el alimento
1 o 2 veces al día, sin exceso
Propensos a enfermedades por agua sucia o cambios bruscos de temperatura
Enfermedades comunes:
Podredumbre de aletas (por mala calidad del agua)
Hinchazón/estreñimiento (por sobrealimentación)
Punto blanco (Ich, por cambios de temperatura)
Signos de alerta: aletas pegadas, falta de apetito, letargo, manchas blancas
Ideal solo o con peces muy tranquilos (Corydoras, caracoles, Otocinclus)
No se debe juntar con otros Bettas machos
No recomendable con Guppys o peces que puedan morder sus aletas
Sí, si querés un pez llamativo, con personalidad y tenés espacio para un pequeño acuario bien cuidado. No necesita convivir con otros peces.
El Betta es ideal para quienes buscan un pez resistente, hermoso y con carácter. Pero necesita cuidados básicos reales: buena temperatura, agua limpia, y un entorno tranquilo. No lo subestimes por ser pequeño.
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